Hoy día, México se encuentra viviendo inimaginables niveles de violencia en el país, asesinatos de periodistas (11 muertes en lo que va del año), carestía, la corrupción está desatada, y a todo ello…
¿En que anda el Presidente Andrés Manuel López Obrador?
En hacerle un boicot a Estados Unidos. En su mañanera, AMLO, volvió a referirse a la cumbre de las Américas, ahora reuniendo países para que no vayan a esta cumbre que organiza el gobierno de los Estados Unidos. El presidente durante su conferencia diaria de prensa, dijo que “a él aún no le llega la invitación y que espera que el gobierno de Joe Biden recapacite e invite a todos (los países de américa)”, y termina diciendo que si Cuba, Venezuela y Nicaragua no están invitados él no va.
A todo ello Bolivia, otro país con similitudes políticas a las actuales de México, se le sumó a López Obrador, es decir, el boicot que está armando AMLO le quiere apestar la fiesta a Estados Unidos, alineándose con los dictadores, pero AMLO dice que no es un boicot, a pesar de que Bolivia, Honduras y Argentina ya lo secundaron.
A todas luces esto nos hace pensar que Lopez Obrador defiende los intereses de los dictadores frente a Estados Unidos, cuando debería mejor sacar tajada de los tiempos actuales y aprovechar la oportunidad que tiene México con sus tratados comerciales y convertirnos los mexicanos en los sustitutos de todo lo que Estados Unidos ya no quiere hacer con China, debería buscar esas inversiones y traerlas a méxico, imaginense la cantidad de empleos que esto generaría, de crecimiento económico, de empresas. Si Estados Unidos nos viera como un socio aliado, confiable, más aún, con una frontera que nos une a ellos y con esta necesidad que tiene Estados Unidos de quitarle producción a China por decisiones geopolíticas.
Si tuviéramos un Gobierno que entendiera esa oportunidad y en lugar de estar en conflicto constante con los Estado Unidos, estuviera dándole la bienvenida a las inversiones americanas, México hoy en día estaría en una etapa de crecimiento envidiable; desgraciadamente no es así, bienvenidos a la realidad, lo más importante para Andrés Manuel López Obrador es defender a la dictadura Cubana, defender a la dictadura chavista de Venezuela, defender a Ortega de Nicaragua, en vez de estar atrayendo inversiones para mejorar las condiciones económicas del país, la prioridad de López Obrador es ser el abogado de los dictadores.